esguince sintomas

Esguince: síntomas, tipos, tratamientos y prevención

Consideraciones generales

Un esguince es una lesión de los ligamentos (fibras fuertes y flexibles que sujetan los huesos) que rodean una articulación. Se pueden romper o estirar demasiado.

Debido a un accidente, la articulación es forzada a tomar una posición no natural. Esta se hincha y provoca dolor.

Existen tres tipos de esguinces:

  • Tipo uno: estiramiento o desgarre mínimo de los ligamentos. Es leve.
  • Tipo dos: el ligamento está ligeramente roto.
  • Tipo tres: el ligamento entero está desgarrado. Es el más severo y la articulación que controla el hueso es totalmente inestable.

Síntomas

  • Dolor e inflamación
  • Cambio de color de la zona, a causa, por ejemplo, de equimosis (sangrado debajo de la piel)
  • Rigidez en la articulación

Tratamiento

Se debe envolver hielo en un pedazo de tela y aplicarlo a la zona afectada (nunca sobre la piel directamente). No hay que tratar de mover la articulación.

Es imprescindible ir al médico para que este diagnostique el esguince y establezca el mejor tratamiento. Normalmente, inmovilizará la zonas unos días con un vendaje y recomendará reposo. Puede que tengas que usar muletas para caminar y hacer rehabilitación. Además, te puede recetar medicamentos para reducir el dolor.

Es bueno mantener elevado el músculo dañado incluso por la noche. Debe permancer a una altura superior al corazón.

Prevención

  • Usar calzado adecuada para realizar deporte y lo suficientemente ajustado
  • Evitar zapatos de tacón alto
  • Calentar y estirar siempre antes de hacer deporte
  • Sólo realizar actividades físicas para las que estés entrenado

10 comentarios en “Esguince: síntomas, tipos, tratamientos y prevención”

    1. ¡Vaya! Parece que eres todo un experto en esguinces. ¿Estás seguro de que hay tantos tipos o solo estás presumiendo de conocimiento? Sería mejor si proporcionaras fuentes para respaldar tus afirmaciones.

    1. ¡Claro que sí! El mejor consejo de prevención para evitar esguinces es ¡no moverte nunca! Así te aseguras de no correr ningún riesgo. Aunque, sinceramente, creo que es mejor aceptar que los accidentes pueden pasar y aprender cómo tratarlos adecuadamente. ¡Buena suerte!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *