¿Cómo prevenir la diabetes gestacional?

Recomendaciones para disminuir el riesgo de diabetes gestacional

La diabetes gestacional es una de las complicaciones de salud más frecuentes durante el embarazo. En España, se estima que entre el 4 y el 7% de las gestantes ha padecido este problema, y todo indica que las cifras van en aumento. Básicamente, se trata de un tipo de diabetes que se desarrolla durante la gestación, ya sea por una producción deficiente de insulina o por un mal funcionamiento de esta hormona, cuya función es transformar la glucosa en energía.

Al respecto, se conoce que las mujeres mayores de 35 años, con antecedentes personales o familiares de diabetes y con hipertensión tienen un riesgo mayor de padecer diabetes gestacional. Asimismo, un estudio estadounidense publicado en la American Journal of Obstetrics and Gynecology encontró que las mujeres con sobrepeso y elevados niveles de azúcar en sangre tienen 4,6 más probabilidades de desarrollar diabetes gestacional. La buena noticia es que muchos de estos factores de riesgo se pueden controlar, reduciendo así el riesgo de padecer diabetes durante el embarazo.

5 recomendaciones para disminuir el riesgo de diabetes gestacional

1.   Reduce tu peso antes del embarazo. Se ha demostrado que las mujeres que llegan al embarazo con sobrepeso u obesidad tienen un riesgo mayor de desarrollar diabetes gestacional. Por tanto, si estás pensando en convertirte en madre, deberías proponerte un plan de adelgazamiento para reducir tu peso antes de salir embarazada, un objetivo que también te puede ayudar a concebir con mayor facilidad. No obstante, si ya estás embarazada no deberías intentar adelgazar ya que puedes poner en peligro la salud y el crecimiento de tu bebé. En ese caso, basta que mantengas una dieta equilibrada y variada que te ayude a aumentar de peso de forma saludable.

2.   Elimina el azúcar añadido de tu dieta. El azúcar es un carbohidrato simple de absorción rápida que eleva los niveles de glucosa en sangre y aumenta la resistencia a la insulina, un problema muy común en el embarazo que aparece como consecuencia del efecto de las hormonas. Además, consumir azúcar también puede provocar picos glucémicos, a los que les sigue una reducción brusca de la glucosa en sangre, lo cual da lugar a importantes alteraciones metabólicas. Por tanto, aunque te resulte difícil prescindir del azúcar durante el embarazo, la mejor alternativa para prevenir la diabetes gestacional es que la elimines de la dieta o al menos limites su consumo.

3.   Reduce el consumo de carbohidratos refinados. Los carbohidratos refinados, al igual que el azúcar, actúan elevando los niveles de glucosa en sangre y aumentando la resistencia a la insulina a largo plazo. De hecho, son una de las peores opciones que puedes incluir en tu dieta si quieres prevenir las alteraciones metabólicas que están en la base de la diabetes gestacional. Lo ideal es que reduzcas su consumo a entre 45 y 60 gramos de carbohidratos en cada comida, lo que equivale a 3 o 4 porciones pequeñas. Asimismo, deberás evitar el consumo de alimentos ricos en carbohidratos refinados como la bollería industrial, el pan blanco, las pastas refinadas y el arroz blanco.

4.   Consume alimentos ricos en fibra. La fibra contribuye a reducir la velocidad de absorción de los hidratos de carbono y azúcares y previene los picos glucémicos después de las comidas. De hecho, se ha demostrado que un incremento diario de 20 gramos de fibra en la dieta puede reducir el riesgo de diabetes gestacional en un 26%. Además, la fibra es un gran aliado del sistema gastrointestinal, por lo que ayuda a prevenir numerosos problemas estomacales durante la gestación. Puedes encontrarla en alimentos como las frutas y vegetales o en panes, cereales y galletas integrales.

5.    Practica ejercicio físico. Hacer ejercicio físico no solo aumenta las probabilidades de que puedas concebir sino que también prepara tu cuerpo para afrontar la gestación y ayuda a prevenir la diabetes gestacional. De hecho, se ha demostrado que mantenerse activas físicamente antes y durante el embarazo, haciendo unas 4 horas semanales de ejercicios, puede reducir el riesgo de diabetes gestacional en un 70%. Además, practicar ejercicio físico también ayuda a mantener bajo control el peso corporal y a reducir el riesgo de hipertensión arterial durante el embarazo.