¿Cómo aliviar el dolor durante el parto?

Cinco estrategias para aliviar el dolor durante el parto

Si ya estás en el noveno mes de embarazo, el momento del parto está cada vez más cerca. Muchas madres primerizas se angustian pensando en cómo será y si sentirán mucho dolor. Lo cierto es que ningún embarazo es igual a otro, y los dolores de parto tampoco se perciben de la misma manera. Sin embargo, existen algunos ejercicios para aliviar, en la medida de lo posible, el dolor durante el parto, sobre todo el que provocan las contracciones. De hecho, muchas mujeres afirman que son peores las contracciones que el propio trabajo de parto.

Por qué duelen las contracciones?

Cuando se acerca el momento del parto, se producen las contracciones, que se encargan de dilatar el cuello del útero y estimular al bebé para que se mueva hasta el canal del parto. Estas son rítmicas, se producen de forma regular y cada vez son más intensas y frecuentes.

Las contracciones duelen porque cada vez que se produce una, los vasos sanguíneos que irrigan el útero prácticamente se quedan sin sangre. Esto genera una ausencia casi total de oxígeno en el tejido uterino, que es lo que provoca el dolor. Cuando la contracción pasa, el músculo se relaja y la sangre vuelve a irrigar el tejido.

La actitud ante el dolor cuenta mucho

Nuestra actitud ante el dolor puede aliviarlo o, al contrario, hacer que empeore. Pensar cosas como “no voy a poder aguantarlo” o “va a ser horrible” solo empeorará la situación, te pondrá más tensa y te predispondrá a sentir el dolor con mayor intensidad.

Obviamente, la actitud de las personas que se encuentran a nuestro alrededor también influirá. Si a nuestro lado se encuentran personas que también experimentan miedo al dolor, nos contagiarán. Al contrario, tener a nuestro lado a personas seguras y calmadas nos ayudará a sobrellevar mejor ese momento.

Por eso, es importante que te mantengas lo más relajada posible, pensando que serás capaz de lidiar con la situación y que se trata de un proceso fisiológico normal que muy pronto pasará, dejándote un regalo precioso: tu bebé.

Métodos naturales para aliviar el dolor durante el parto

1. Libertad de movimientos. Es fundamental que la embarazada tenga la mayor libertad de movimiento posible y que esté cómoda. Estar inmovilizada en una cama no es lo más natural y no contribuye a aliviar el dolor. Puedes mantenerte de pie o ponerte en cuclillas o semicuclillas. De esta forma estarás facilitando la separación de los huesos de la pelvis. Además, también lograrás que el bebé se coloque más rápido en el canal de parto

2. Técnicas de relajación. Existen diferentes técnicas de relajación que permiten aliviar el dolor. De esta forma podrás liberar el estrés y disminuir el malestar. La técnica más sencilla es la relajación muscular progresiva de Jacobson, que consiste en tensar y relajar los diferentes grupos musculares, comenzando por los dedos de los pies hasta llegar al entrecejo. No obstante, es recomendable que aprendas a practicar la relajación mucho antes del parto.

3. Técnicas de respiración. La respiración profunda es un método muy eficaz para controlar cualquier tipo de dolor, incluyendo los que produce un parto. La clave radica en que permite controlar el flujo de oxígeno que entra al organismo y enviarlo a los músculos que están más tensos, para relajarlos. Por eso, es recomendable practicar ejercicios de tai-chi o yoga durante el embarazo, en las cuales también se potencia la respiración.

4. Baños de inmersión en agua. La sensación de estar sumergida en agua no solo es muy agradable y relajante sino que también es un remedio eficaz para lidiar con el dolor. El agua templada permite que los músculos perineales se relajen, facilitando la expulsión del bebé y mitigando el dolor.

5. Masajes relajantes. Puedes darte un masaje frotándote delicadamente el abdomen cuando tengas las contracciones, aunque también puedes pedirle a tu pareja que te dé un masaje, sobre todo en la parte baja de la espalda, el cual alivia la tensión y el dolor. Una buena idea consiste en aplicar una toalla caliente para relajar la tensión de los músculos, antes de dar el masaje.