5 consejos para lidiar con la sexualidad infantil
A medida que el niño crece va descubriendo poco a poco su cuerpo por lo que no es extraño que un día le encuentres tocándose sus genitales. Como norma, esto sucede por primera vez alrededor de los 3 años o 4 años, aunque en algunos niños este comportamiento aparece un poco más tarde o a edades más tempranas.
Sin embargo, independientemente de su edad, esta conducta se origina por el deseo de descubrir y explorar las partes íntimas de su cuerpo, sobre todo cuando se percata de que los roces pueden generar sensaciones placenteras. En algunos casos, estos episodios de autoerotismo, que antes eran completamente desconocidos, se convierten en su centro de atención.
Como actuar frente al desarrollo de nuestros hijos
Para ningún padre es fácil hablar de sexo con su hijo, sobre todo si este ni siquiera llega a los 5 años. En este momento surgen muchas dudas: ¿Cómo le explico qué es la sexualidad? ¿Le debo hablar de las sensaciones sexuales? ¿Tendrá edad suficiente para comprender que la sexualidad es algo íntimo? ¿Si le hablo del tema se obsesionará y despertaré aún más su curiosidad?
He aquí algunos consejos para que enfrentes adecuadamente esta situación:
- Aborda el tema de manera natural. Los niños se forman sus propias ideas a partir de lo que percibe en los demás y, en este sentido, la actitud de los padres es fundamental. Si tu hijo nota que tratas la sexualidad con temores, recelos y hasta con un poco de vergüenza la asociará con algo negativo o incluso es posible que alimentes su curiosidad. Por tanto, intenta abordar el tema de la manera más natural y positiva posible, sin hacer un drama.
- Controla tus emociones. Muchos padres se irritan o escandalizan cuando encuentran a su hijo tocándose, pero debes tener en cuenta que, por muy pequeño que sea, ya es capaz de leer tus emociones y descifrarlas. Una reacción brusca, un regaño exagerado o unos gritos descompuestos pueden avergonzar al niño y hacerle sentir culpable, una sensación que puede acompañarle incluso cuando se haga mayor y que se convertirá en un obstáculo para desarrollar una sexualidad plena. Esto significa que, si le encuentras tocándose, deberás tomar un respiro y armarte de paciencia.
- Utiliza las palabras correctas. Cuando vayas a hablar sobre sexo con tu hijo, aunque sea pequeño, es importante que recurras a las palabras adecuadas. No utilices palabras vulgares, pero tampoco apelativos cariñosos o despectivos, llama a cada cosa por su nombre, así le transmitirás la idea de que la sexualidad es una parte natural de la vida.
- Recuerda que es muy difícil que un niño de 3 años o 4 años pueda comprender cómo funciona la sexualidad, pero esto no significa que le debas esconder por qué experimenta sensaciones placenteras cuando acaricia sus genitales. Para explicárselo deberás encontrar un lenguaje sencillo, adecuado a su edad. Evita darle demasiados detalles, lo más importante es que le des la confianza suficiente como para preguntarte cuando quiera saber algo más.
- No le prohíbas tocarse, distráelo. Si el niño descubre las sensaciones placenteras vinculadas a la sexualidad es normal que quiera tocarse. No es prudente que lo regañes, lo avergüences y mucho menos que se lo prohíbas pues esta actitud generalmente resulta contraproducente y solo sirve para reforzar su conducta. Lo mejor es que le distraigas proponiéndole algún juego que pueda captar su atención. A la larga, este comportamiento suele desaparecer de la misma manera en que apareció.
- Enséñale la importancia de la privacidad. Es normal que niños y niñas investiguen su sexualidad, por lo que quizás este comportamiento tardará un poco en desaparecer, hasta que hayan saciado su curiosidad. Por consiguiente, es importante que le hables de la privacidad y la intimidad. Explícale que hay determinados comportamientos, como defecar, orinar o tocarse los genitales, que son muy personales y no se deben exhibir en público.
¿Cuándo preocuparse?
Lo usual es que estos comportamientos no sean nocivos. De hecho, en esta etapa ni siquiera se puede hablar de masturbación en el sentido más estricto del término. No obstante, deberás mantenerte atenta a sus hábitos, si notas que tu hijo se toca en exceso, que estos comportamientos fomentan el aislamiento o que le producen angustia, entonces deberías buscar la ayuda de un psicólogo.
¡Vaya tema! Creo que es importante hablar abiertamente sobre la sexualidad infantil para evitar malentendidos.
¡Qué interesante artículo! Creo que es importante hablar abiertamente sobre la sexualidad infantil.
Creo que es mejor hablar abiertamente con los niños sobre la sexualidad para evitar malentendidos.
Creo que es importante hablar abiertamente sobre la sexualidad infantil y comprenderla en lugar de asustarnos.
No puedo estar más en desacuerdo contigo. La sexualidad infantil es un tema delicado que requiere mucho cuidado y protección. No podemos normalizar ni justificar comportamientos inapropiados. La seguridad de los niños siempre debe ser la prioridad.
¡Vaya tema! Yo creo que es normal y no hay que alarmarse. ¿Qué opinan ustedes?
¡Vaya tema! ¿Alguien más se siente incómodo hablando de la sexualidad infantil? 😳💭
¡Totalmente de acuerdo! Es un tema delicado y sensible que requiere respeto y cuidado al abordarlo. Es comprensible sentirse incómodo, pero es importante recordar que la protección de los niños siempre debe ser nuestra prioridad.